- Los mercados bursátiles están en modo de espera antes de las elecciones estadounidenses, con un posible beneficio para los sectores financiero e industrial si Trump gana.
- Una victoria demócrata podría llevar a impuestos más altos, potencialmente afectando negativamente a los mercados de renta variable.
- Independientemente del ganador, los sectores de infraestructura y tecnología probablemente recibirán apoyo de ambas partes.
Las elecciones presidenciales de Estados Unidos, programadas para el 5 de noviembre, han generado expectación en los mercados bursátiles, con una evidente prudencia mientras se espera el resultado de estos comicios tan disputados. Donald Trump lidera las encuestas como favorito, aunque se anticipa un desenlace ajustado, lo que genera incertidumbre respecto a quién será el próximo presidente. Según varios expertos de mercado, una victoria de Trump podría ser más favorable para la bolsa que una de su oponente demócrata, Kamala Harris.
Stephen Auth, director de inversiones de renta variable de Federated Hermes, señala que una victoria de Trump probablemente impulsaría los sectores financiero, industrial, energético y a las empresas de pequeña capitalización. En tal escenario, se esperaría un mayor repunte en las acciones 'value' y de pequeña capitalización. Por otro lado, Raphael Gallardo y Kevin Thozet de Carmignac advierten que una mayoría demócrata podría afectar negativamente a los mercados debido a un incremento en impuestos y gastos. Sin embargo, un triunfo republicano podría ser inflacionista y elevar el déficit fiscal.
El 'Trump trade' domina actualmente, con inversores comprando dólares, ya que las encuestas se estrechan. Kathleen Brooks, de XTB, destaca la dificultad de prever una caída significativa del dólar antes de las elecciones. El mercado del oro también ha sido influenciado, alcanzando nuevos máximos históricos esta semana.
Las políticas fiscales de ambos partidos representan diferencias clave en su impacto potencial en los mercados. Los republicanos buscan reducir impuestos para incentivar la economía, mientras que los demócratas planean incrementarlos a los más ricos para reducir la desigualdad. Estos cambios afectarán a sectores como bienes de lujo, comunicaciones y servicios financieros. Jean-Paul van Oudsheusden de eToro anticipa que empresas como Procter & Gamble, Verizon y JP Morgan podrían ver cambios significativos.
En defensa, salud y energía, las políticas también divergen. Una victoria de Trump podría significar un mayor presupuesto de defensa, beneficiando a firmas como GE Aerospace y Palantir. Con Harris, el enfoque probablemente estará en la sanidad, favoreciendo a empresas como UnitedHealth. En energía, los republicanos apoyan los combustibles fósiles, mientras que los demócratas impulsan las energías renovables.
A pesar de las diferencias, algunos sectores podrían beneficiarse independientemente de quién gane. Infraestructura y tecnología son áreas que ambos partidos apoyan. Las infraestructuras de Estados Unidos requieren renovación, y ambos partidos buscan mantener la ventaja tecnológica sobre China. Con Trump, el riesgo de disolver grandes empresas tecnológicas es menor, lo que podría favorecer a los inversores de este sector.