El Índice del Dólar estadounidense (DXY), que mide el valor del USD frente a una cesta de divisas, subió hacia 106.70 después de que Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo (BCE), confirmara las conversaciones sobre un posible recorte de tasas de interés de 50 puntos básicos. Los comentarios de Lagarde siguieron al recorte de la tasa de referencia del BCE en 25 puntos básicos, la cuarta vez que se reducen las tasas este año.
Los operadores favorecieron al Dólar frente al Euro tras la decisión de tasas del BCE, lo que provocó que el DXY se disparara por encima de 106.50.
Además, los datos del Índice de Precios de Producción (IPP) de EE.UU. mostraron una inflación por encima de las expectativas, lo que podría ralentizar el giro de la Reserva Federal (Fed) hacia una política monetaria laxa el próximo año.
El Índice del Dólar estadounidense ha detenido su reciente declive y recuperado parte del terreno perdido el jueves. El índice DXY ha logrado mantenerse por encima del nivel de 106.00 a pesar de los datos de sentimiento mixtos y la especulación sobre la desaceleración del ciclo de subidas de tasas de la Fed.
Los indicadores de Índice de Fuerza Relativa (RSI) y Promedio Móvil de Convergencia/Divergencia (MACD) también sugieren que el índice es resiliente y podría continuar subiendo.
El DXY enfrenta resistencia en 106.50 -107.00. Si recupera esta área, podría volver a probar la zona de 108.00.
El Dólar estadounidense (USD) es la moneda oficial de los Estados Unidos de América, y la moneda "de facto" de un número significativo de otros países donde se encuentra en circulación junto con los billetes locales. Según datos de 2022, es la divisa más negociada del mundo, con más del 88% de todas las operaciones mundiales de cambio de divisas, lo que equivale a una media de 6.6 billones de dólares en transacciones diarias. Tras la Segunda Guerra Mundial, el USD tomó el relevo de la libra esterlina como moneda de reserva mundial.
El factor individual más importante que influye en el valor del Dólar estadounidense es la política monetaria, que está determinada por la Reserva Federal (Fed). La Fed tiene dos mandatos: lograr la estabilidad de precios (controlar la inflación) y fomentar el pleno empleo. Su principal herramienta para lograr estos dos objetivos es ajustar las tasas de interés. Cuando los precios suben demasiado deprisa y la inflación supera el objetivo del 2% fijado por la Fed, ésta sube los tipos, lo que favorece la cotización del dólar. Cuando la Inflación cae por debajo del 2% o la tasa de desempleo es demasiado alta, la Fed puede bajar las tasas de interés, lo que pesa sobre el Dólar.
En situaciones extremas, la Reserva Federal también puede imprimir más dólares y promulgar la flexibilización cuantitativa (QE). La QE es el proceso mediante el cual la Fed aumenta sustancialmente el flujo de crédito en un sistema financiero atascado. Se trata de una medida de política no convencional que se utiliza cuando el crédito se ha agotado porque los bancos no se prestan entre sí (por miedo al impago de las contrapartes). Es el último recurso cuando es poco probable que una simple bajada de las tasas de interés logre el resultado necesario. Fue el arma elegida por la Fed para combatir la contracción del crédito que se produjo durante la Gran Crisis Financiera de 2008. Consiste en que la Fed imprima más dólares y los utilice para comprar bonos del gobierno estadounidense, principalmente de instituciones financieras. El QE suele conducir a un debilitamiento del Dólar estadounidense.
El endurecimiento cuantitativo (QT) es el proceso inverso por el que la Reserva Federal deja de comprar bonos a las instituciones financieras y no reinvierte el capital de los valores en cartera que vencen en nuevas compras. Suele ser positivo para el dólar estadounidense.