El Yen japonés (JPY) recupera tracción positiva tras la modesta caída del día anterior, ya que las incertidumbres relacionadas con el comercio mantienen a los inversores en vilo y continúan apoyando a los activos tradicionales de refugio seguro. Además, los datos publicados hoy mostraron que los pedidos de maquinaria básica de Japón repuntaron bruscamente en febrero y superaron las expectativas del mercado. Esto, junto con las esperanzas de que Japón pueda alcanzar un acuerdo comercial con EE.UU. y la creciente aceptación de que el Banco de Japón (BoJ) continuará subiendo las tasas de interés en 2025, resultan ser otros factores que apoyan al JPY.
Mientras tanto, las expectativas de un BoJ de línea dura marcan una gran divergencia en comparación con las crecientes apuestas por un alivio de política más agresivo por parte de la Reserva Federal (Fed). Esto resultaría en una mayor reducción del diferencial de tasas entre Japón y EE.UU., lo que, a su vez, apoya las perspectivas de un movimiento de apreciación adicional para el JPY de menor rendimiento. El Dólar estadounidense (USD), por otro lado, languidece cerca de un mínimo de varios años en medio de preocupaciones de que las políticas comerciales de la administración Trump obstaculicen el crecimiento económico de EE.UU. Esto mantiene al par USD/JPY cerca de un mínimo de más de seis meses alcanzado la semana pasada.
Desde una perspectiva técnica, la incapacidad del par USD/JPY para atraer compradores significativos sugiere que una tendencia a la baja de varios meses aún está lejos de terminar. Además, los osciladores en el gráfico diario se mantienen profundamente en territorio negativo, lo que sugiere aún más que el camino de menor resistencia para los precios al contado sigue siendo a la baja. Mientras tanto, cualquier caída adicional probablemente encontrará algo de soporte cerca de la región de 142.25-142.20, o el mínimo semanal, antes de la marca de 142.00, o el mínimo de varios meses alcanzado el viernes pasado. Una ruptura convincente por debajo de este último reafirmará el sesgo negativo y abrirá el camino para un movimiento de depreciación adicional a corto plazo para el par de divisas.
Por otro lado, un intento de recuperación por encima de la marca de 143.00 podría ahora enfrentar una fuerte resistencia cerca del máximo de la oscilación de la noche anterior, alrededor de la región de 143.60. Cualquier movimiento adicional hacia arriba podría verse como una oportunidad de venta y permanecer limitado cerca de la cifra redonda de 144.00. Este último debería actuar como un punto clave, que si se supera de manera decisiva podría desencadenar un rally de cobertura de cortos y elevar el par USD/JPY hacia la barrera horizontal de 144.45-144.50 en ruta hacia la marca psicológica de 145.00. El impulso podría extenderse aún más hacia la zona de 145.50 y la cifra redonda de 146.00.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.