El USD/JPY subió al final de la sesión norteamericana después de que la Reserva Federal revelara las actas de su reunión de diciembre. Esto, junto con los datos de empleo de EE.UU. y la aversión al riesgo, mantiene al Dólar respaldado durante todo el día. El par cotiza en 158.34, subiendo un 0.19%.
El USD/JPY ha superado el máximo de diciembre antes del informe de nóminas no agrícolas de EE.UU., abriendo la puerta para desafiar la cifra de 160.00. Debido a estar cerca de esta última, es probable que las autoridades japonesas comiencen su intervención verbal para detener el avance del Dólar.
Dicho esto, la primera resistencia clave del USD/JPY sería 159.00. Una vez despejada, la siguiente parada sería 160.00 antes de probar el pico del año pasado en 161.95.
Por el contrario, si los vendedores intervienen y evitan que el USD/JPY suba por encima de 159.00, el primer soporte sería el Tenkan-Sen en 157.28. Una ruptura de este último expondrá el mínimo del 31 de diciembre de 156.02.
El Yen japonés (JPY) es una de las divisas más negociadas del mundo. Su valor viene determinado en líneas generales por la marcha de la economía japonesa, pero más concretamente por la política del Banco de Japón, el diferencial entre los rendimientos de los bonos japoneses y estadounidenses o el sentimiento de riesgo entre los operadores, entre otros factores.
Uno de los mandatos del Banco de Japón es el control de divisas, por lo que sus movimientos son clave para el Yen. El BoJ ha intervenido directamente en los mercados de divisas en ocasiones, generalmente para bajar el valor del Yen, aunque se abstiene de hacerlo a menudo debido a las preocupaciones políticas de sus principales socios comerciales. La actual política monetaria ultralaxa del BoJ, basada en estímulos masivos a la economía, ha provocado la depreciación del Yen frente a sus principales pares monetarios. Este proceso se ha exacerbado más recientemente debido a una creciente divergencia de políticas entre el Banco de Japón y otros bancos centrales principales, que han optado por aumentar bruscamente los tipos de interés para luchar contra niveles de inflación de décadas.
La postura del Banco de Japón de mantener una política monetaria ultralaxa ha provocado un aumento de la divergencia política con otros bancos centrales, en particular con la Reserva Federal estadounidense. Esto favorece la ampliación del diferencial entre los bonos estadounidenses y japoneses a 10 años, lo que favorece al Dólar frente al Yen.
El Yen japonés suele considerarse una inversión de refugio seguro. Esto significa que en tiempos de tensión en los mercados, los inversores son más propensos a poner su dinero en la moneda japonesa debido a su supuesta fiabilidad y estabilidad. En épocas turbulentas, es probable que el Yen se revalorice frente a otras divisas en las que se considera más arriesgado invertir.