El USD/MXN ha comenzado la jornada subiendo a un máximo de dos días en 20.62 pero pasado el mediodía europeo ha caído a un mínimo diario en 20.29. Al momento de escribir, el par cotiza sobre 20.40, perdiendo un 0.78% en lo que llevamos de jornada.
El Dólar estadounidense medido por su índice DXY se ha desplomado este viernes a mínimos de tres años en 99.02. Varias son las razones que han llevado al billete verde a este suelo.
En primer lugar, el Dólar ha caído en picado tras el anuncio de China de subir sus aranceles a los productos estadounidenses al 125% en la mañana europea del viernes. La decisión se ha tomado como represalia al aumento de las tarifas a China al 145% por parte de Donald Trump.
En segundo lugar, los precios de producción de Estados Unidos se moderaron más de lo previsto en marzo, situándose en el 2.7% anual en la lectura general, por debajo del 3.2% previo y del 3.3% previsto. El índice subyacente se moderó al 3.3% frente al 3.5% de febrero, por debajo del 3.6% estimado. La suavización de los precios de producción junto a la moderación de los precios al consumo publicados ayer podría inclinar a la Fed a favor de un recorte de tasas de interés más pronto de lo esperado, lo que pesa sobre el USD.
Finalmente, el índice de sentimiento del consumidor de la Universidad de Michigan ha caído 6.2 puntos en la lectura preliminar de abril, situándose en 50.8 desde los 57 de marzo, su nivel más bajo desde junio de 2022.
México ha recibido positivamente sus cifras de producción industrial, ya que ha subido un 2.5% mensual en febrero tras caer un 0.4% en enero. El dato ha mejorado notablemente la expectativa del mercado, que esperaba un aumento del 0.1%. Esta es la mayor subida vista por el indicador desde el 2020.
Ayer, sin embargo, Donald Trump puso en alerta a los operadores mexicanos después de publicar en la red social Truth que podría subir los aranceles a México e imponerle sanciones si no da a Texas los 1.3 millones de acres de agua que según el mandatario debería darle.
La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, se apresuró a responder que México está cumpliendo el tratado en medida de la disponibilidad de agua, atribuyendo a la sequía de los últimos años los retrasos en los envíos.
Las Minutas de Banxico publicadas ayer también revelaron que varios miembros de la entidad advirtieron que está aumentando la probabilidad de que México entre en recesión.
Tras las fuertes oscilaciones de los últimos días, no hay una dirección clara para las próximas horas. En caso de extender la caída, el soporte inicial estará en el mínimo semanal registrado el miércoles 9 de abril alrededor de 20.15. Una caída por debajo de este nivel apuntará a la zona psicológica de 20.00 primero y al mínimo de 2025 en 19.83 después.
Al alza, tendríamos que ver una recuperación por encima de la media móvil de 100 períodos en gráfico horario en 20.59 para ver una extensión de la subida hacia el techo de los últimos dos meses registrado el 9 de abril en 21.08.
El Peso mexicano (MXN) es la moneda más comercializada entre sus pares latinoamericanas. Su valor está ampliamente determinado por el desempeño de la economía mexicana, la política del banco central del país, la cantidad de inversión extranjera en el país e incluso los niveles de remesas enviadas por los mexicanos que viven en el extranjero, particularmente en los Estados Unidos. Las tendencias geopolíticas también pueden afectar al MXN: por ejemplo, el proceso de nearshoring (o la decisión de algunas empresas de reubicar la capacidad de fabricación y las cadenas de suministro más cerca de sus países de origen) también se considera un catalizador para la moneda mexicana, ya que el país se considera un centro de fabricación clave en el continente americano. Otro catalizador para el MXN son los precios del petróleo, ya que México es un exportador clave de la materia prima.
El objetivo principal del banco central de México, también conocido como Banxico, es mantener la inflación en niveles bajos y estables (en o cerca de su objetivo del 3%, el punto medio de una banda de tolerancia de entre el 2% y el 4%). Para ello, el banco establece un nivel adecuado de tasas de interés. Cuando la inflación es demasiado alta, Banxico intentará controlarla subiendo las tasas de interés, lo que encarece el endeudamiento de los hogares y las empresas, enfriando así la demanda y la economía en general. Las tasas de interés más altas son generalmente positivas para el Peso mexicano (MXN), ya que conducen a mayores rendimientos, lo que hace que el país sea un lugar más atractivo para los inversores. Por el contrario, las tasas de interés más bajas tienden a debilitar el MXN.
La publicación de datos macroeconómicos es clave para evaluar el estado de la economía y puede tener un impacto en la valuación del peso mexicano (MXN). Una economía mexicana fuerte, basada en un alto crecimiento económico, un bajo desempleo y una alta confianza es buena para el MXN. No solo atrae más inversión extranjera, sino que puede alentar al Banco de México (Banxico) a aumentar las tasas de interés, en particular si esta fortaleza se acompaña de una inflación elevada. Sin embargo, si los datos económicos son débiles, es probable que el MXN se deprecie.
Como moneda de mercado emergente, el Peso mexicano (MXN) tiende a subir durante períodos de riesgo, o cuando los inversores perciben que los riesgos generales del mercado son bajos y, por lo tanto, están ansiosos por participar en inversiones que conllevan un mayor riesgo. Por el contrario, el MXN tiende a debilitarse en momentos de turbulencia del mercado o incertidumbre económica, ya que los inversores tienden a vender activos de mayor riesgo y huir a los refugios seguros más estables.