MADRID, 11 abr (Reuters) - España es partidaria de una relación más equilibrada entre la Unión Europea y China, basada en la negociación para resolver las diferencias y la cooperación en áreas de interés común, dijo el viernes en Pekín el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, tras reunirse con el presidente chino, Xi Jinping.
La visita de Sánchez tiene como objetivo estrechar lazos económicos y políticos con Pekín ante las consecuencias globales de la política arancelaria del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, buscando posicionar a España como interlocutor entre China y la Unión Europea y atraer inversiones chinas.
Las autoridades españolas han rechazado la advertencia estadounidense de que acercarse al país asiático sería "cavar su propia tumba".
Al inicio de su reunión, Sánchez dijo que España veía a China como un socio de la UE. Oficialmente, el bloque describió a China como un "socio para la cooperación, un competidor económico y un rival sistémico" en su planificación estratégica.
"Queremos trabajar en las inversiones de una forma equilibrada para que redunden en el desarrollo de nuestros países desde nuestras visiones respectivas y queremos fomentar el acercamiento entre nuestras sociedades", dijo Sánchez a Xi.
El mandatario chino destacó que se trataba de la tercera visita de Sánchez en otros tantos años al país y añadió que el fortalecimiento de las relaciones bilaterales en el actual contexto global promueve la paz, la estabilidad y la prosperidad.