- Las acciones de Grifols suben significativamente tras anunciar una emisión de bonos de 1.300 millones de euros y la extensión de su línea de crédito revolving.
- Standard & Poor's mejora la calificación crediticia de Grifols a 'B+' con perspectiva estable, reflejando expectativas de mejora operativa.
- Aunque la nueva emisión supone un mayor costo financiero, permite a Grifols refinanciar su deuda y posponer vencimientos significativos hasta 2027.
Las acciones de Grifols han experimentado un fuerte incremento este jueves, impulsadas por el anuncio de una emisión de bonos por 1.300 millones de euros y la extensión de su línea de crédito revolving. Este anuncio fue realizado por la compañía farmacéutica el miércoles, después del cierre del mercado. La agencia de calificación Standard & Poor's respondió elevando el rating de Grifols a 'B+' desde 'B', lo que refleja un panorama más positivo para la empresa.
Grifols realizó una colocación privada de bonos garantizados a valor nominal al 7,125% con vencimiento en mayo de 2030. Los ingresos generados se destinarán a reducir la deuda de la compañía, utilizando 300 millones de euros, junto con efectivo disponible, para amortizar el saldo restante de 343 millones de euros de bonos con vencimiento en febrero de 2025. Los restantes 1.000 millones de euros se utilizarán para liquidar completamente la línea de crédito revolving, que ha sido extendida hasta mayo de 2027.
S&P ha destacado que esta transacción representa un paso crucial para aliviar la presión sobre la liquidez de Grifols, posponiendo los vencimientos significativos de deuda hasta 2027. La empresa cuenta ahora con una línea de crédito revolving totalmente no dispuesta, permitiendo a la gerencia centrarse en objetivos estratégicos. Asimismo, S&P prevé que Grifols mejorará su desempeño operativo en 2024-2025, apoyado por una fuerte demanda de sus medicamentos derivados del plasma y mejoras en la rentabilidad.
Los analistas de Banco Sabadell consideran que tanto la emisión de bonos como la mejora en el rating son positivas para Grifols. Permiten refinanciar la deuda de 2025 y aportan mayor estabilidad financiera. Sin embargo, advierten sobre el incremento del gasto financiero, estimado en unos 30 millones de euros, debido a las condiciones menos favorables de la nueva emisión en comparación con la deuda repagada. A pesar de esto, el costo de esta emisión es inferior al de la realizada en el primer semestre, que fue del 7,5%.